Es el camping donde he aparcado la caravana de momento en el verano hasta que me vaya en septiembre a Francia.
Es bastante tranquilo. Es grande y con gente, pero como están muy esparcidos los fijos no parece que la gente sea tanta y no hay barullo.
No es muy caro.
La pega para los que estén de forma temporal es que te ponen en un lugar destinado a ello donde no tienes agua para conectar a la caravana.
En todo el camping tampoco existen desagues.
Merece la pena conocerlo. La piscina es estupenda y tiene unas vistas a la montaña espectaculares.
Está siguado cerca de Rascafría.